Que la moda y la belleza beben de la estética de épocas pasadas no es nada nuevo. Es un maravilloso déjà vu que cada cierto tiempo nos gusta permitirnos. Y aunque todas las décadas nos han brindado imágenes evocadoras, los 60´s son, por derecho propio, uno de los periodos a los que con más rotundidad han invocado con fuerza gurús de belleza y diseñadores. Se lo merecen. Por obra y gracia de mujeres como Briggite Bardot, Audrey Hepburn, Twiggy, Marisa Berenson o Talitha Getty.
Y es en estas dos últimas, Marisa y Talitha, y en el refugio paradisíaco de la época, Marrakech, donde la marca de lencería de lujo canaria Gonzales, se inspira para crear su nueva colección Bridal, ÁMBAR, que presentó el viernes 21 de Marzo dentro de la iniciativa de Gran Canaria Moda Cálida Bridal Collection en el marco incomparable de San Martín Centro de Cultura Contemporánea y que tuve el placer de ser invitada.
ÁMBAR es en palabras de Carmen González, su diseñadora, "una mujer bohemia, relajada, glamurosa, que hace lo que quiere, ajena a las convenciones.
ÁMBAR es la mujer que se casa en una playa, amando en paisajes desérticos.
ÁMBAR se casa. Sólo el y ella."
La colección Bridal de Gonzales está bañada con los colores de un atardecer en la playa; blancos dorados por el sol, malvas, rosas cálidos y oro puro. La seda es el tejido omnipresente de la colección ÁMBAR pero con detalles en encaje.
La lencería de Gonzales está pensada para hacernos sentir sexy y deseadas, por eso siempre cuenta con favorecedores modelos en triángulo, bandeau o media copa, la braguita de talle alto con detalles con volante (que es ya sello de la casa) o con ligueros, modelos más escuetos o sus más que sugerentes faldas lencera con aberturas infinitas en un color dorado que invitan a casarse de una forma menos convencional y más romántica, más como deseamos y no como se espera de nosotras.
Esta vez los complementos que acompañaron la lencería de Gonzales fue, una gargantilla ancha de satén y el maquillaje, que representaba a esa mujer oriental con ojos ahumados y rotundos de eyeliner que enmarcan la mirada, labios desnudos de color - que recordaba a esa belleza sixties de la época- y una gran media luna dorada en la frente que simulaba el tercer ojo, ese gran símbolo de la imaginación y la clarividencia.
El último toque, esas melenas que rozaban la cintura con extrema sensualidad y que rubricaban a una novia bohemia, decidida y que no renuncia al erotismo en un día tan especial.
ÁMBAR, es la colección de lencería nupcial donde encontraremos todo lo necesario para que ese día tras quitarnos el vestido, luzcamos igual de bien por dentro que por fuera y conseguir que sea inolvidable para nuestro recién estrenado marido. ¿Qué os parece la nueva colección "novias" de Gonzales?.
Fotografías de Marcos Cabrera
Love it gracias por compartir
ResponderEliminar